El abandono de animales es algo que en nuestro país está a la orden del día, y digo en nuestro país porque aunque en todas partes hay desalmados similares, hay culturas donde está tan mal visto que esta práctica está casi erradicada. Holanda es, probablemente, el mejor ejemplo de país sin perros abandonados. Y es que, al contrario que ocurre en España y en otros países más permisivos, Holanda tiene duras leyes contra el maltrato animal y el abandono, con multas que pueden superar los 16.000 euros y multas de cárcel.