La salud bucal es fundamental para que nuestro organismo funcione de forma eficiente y podamos estar verdaderamente sanos. El cuidado bucodental no solamente depende de cada persona, sino de los profesionales de la odontología. El dentista, es un especialista tan necesario como lo es el pediatra, el obstetra o el internista, pues es el encargado no solamente de solventar problemas que afecten nuestra dentadura y cavidad bucal, sino que también es quien debe guiarnos en la medicina preventiva, para evitar llegar a males mayores.
En el caso de la atención a niños, el profesional indicado es un Odontopediatra, que si bien es cierto es un odontólogo, tiene un entrenamiento y conocimiento especial, que va dirigido específicamente a los más pequeños y hasta la adolescencia. El odontopediatra es fundamental y necesario para que la salud bucal de los niños y niñas sea la mejor, de forma que su salud integral también lo sea.
Para explicarnos realmente las funciones y las particularidades de los odontopediatras, contamos con la asesoría del equipo de Tot Dental, quienes con su experiencia en el área odontológica y odontopediatrica, nos ayudarán a comprender la importancia de contar con este profesional para asegurar la salud integral de nuestros pequeños.
Odontopediatría y el odontopediatra
Para poder empezar a conocer al odontopediatra, tenemos que definir la Odontopediatría, y podemos hacerlo como la especialidad de la odontología dedicada a la salud bucal del bebé, niño y adolescente. Los profesionales formados en esta área tienen los conocimientos que permiten la implementación de medidas preventivas específicas para cada caso, así como el tratamiento oportuno, eficiente y de vanguardia de todas las enfermedades bucales que pueden presentarse durante esta etapa de la vida.
El odontopediatra guía al niño y a su familia hacia una actitud positiva frente la salud bucal, con foco en la importancia de mantener hábitos saludables en el hogar así como en el manejo de la conducta durante la experiencia odontológica.
Los dentistas pediátricos se dedican a la salud oral de los niños desde la infancia hasta la adolescencia, tienen la experiencia y las calificaciones para cuidar los dientes, las encías y la boca de un niño a lo largo de las diversas etapas de la infancia. Los niños comienzan a obtener sus dientes de leche durante los primeros 6 meses de vida. A la edad de 6 o 7 años, comienzan a perder su primer conjunto de dientes, que son reemplazados por dientes secundarios permanentes. Los bebés, los niños pequeños, los niños en edad escolar y los adolescentes experimentan diferentes fases de crecimiento y tienen diferentes necesidades de atención de salud oral por parte de los adultos.
Sin un cuidado dental de odontopediatría adecuado, los niños se enfrentan a posibles caries orales y enfermedades que pueden causar una vida de dolor y complicaciones. Un dentista de odontopediatría a menudo puede proporcionar un enfoque más integral del tratamiento para satisfacer esas necesidades. Los dentistas generales a menudo conocen parte de esta información, pero sin la capacitación especializada, es posible que no puedan brindar la atención que está orientada a las necesidades de los niños.
¿Por qué un Odontopediatra?
El primer error es pensar que porque nosotros como adultos nos sentimos a gusto con un odontólogo, nuestro pequeño también lo hará. Ir al dentista suele ser incómodo por línea general, pero si el ambiente es el ideal, irremediablemente nos sentiremos mejor en el lugar.
Los dentistas especializados en odontopediatría saben cómo examinar y tratar a los niños de maneras que los hagan sentir cómodos. Además, los dentistas pediátricos usan equipos especialmente diseñados en consultorios que están arreglados y decorados con los niños en mente, mientras que ofrecen una amplia gama de opciones de tratamiento, así como experiencia y capacitación para cuidar los dientes, las encías y la boca de los pequeños.
Los odontopediatras, tienen dos o tres años adicionales de capacitación y estudio, un dentista infantil se centra en el tratamiento del desarrollo de los dientes, el comportamiento infantil y la psicología, haciendo que los niños se sientan cómodos, pues es importante destacar que los niños no solo tienen diferentes necesidades dentales, sino que estos también se comportan de manera diferente a los adultos. Los dentistas infantiles tienen una amplia y única experiencia en hablar con los niños, tratar sus emociones y aliviar sus miedos, así como también reciben formación sobre el tratamiento de niños con necesidades especiales.
¿Qué tratamientos cubren los odontopediatras?
Hay tratamientos odontológicos propios de la infancia, por lo que los odontopediatras son los ideales para solventar y aplicar los siguientes tratamientos, tomando en cuenta no solamente el aspecto de salud bucal, sino trabajando la confianza y buscando llegar a los niños de una forma agradable, alegre y dinámica, de forma que no padezcan de miedo al dentista a medida que crecen:
- Obturación: Se conoce popularmente con el nombre de “empaste dental” y se suele usar tanto en adultos como en niños. Estas caries, si no se tratan, terminan afectando al nervio, así que hay que tratarlas cuanto antes para evitar molestias y futuros problemas.
- Selladores de surcos y fisuras: Los selladores de surcos son una de las intervenciones más habituales en niños. Se trata de un tratamiento pensado para rellenar las fisuras que puedan aparecer en la superficie de los dientes. Un método indoloro y muy fácil de realizar que permitirá proteger a los niños de las caries.
- Aplicación de flúor: Dentro de los tratamientos de odontopediatría, tenemos que destacar aquellos que se realizan con fines preventivos. Este es el caso de la aplicación de flúor, un método que se suele llevar a cabo para endurecer el esmalte de los dientes y permitir que los niños tengan unos dientes fuertes y sanos.
- Pulpectomía: La pulpectomía es un tratamiento similar a la endodoncia que se realiza en adultos, pero con la diferencia de que, en el caso de los niños, la caries estará afectando a un diente de leche. Recordemos que la endodoncia es el tratamiento que se aplica en los dientes de los adultos cuando aparece una caries que llega hasta la pulpa del diente. La pulpotomía consiste en eliminar parte de la pulpa o nervio del diente. Se colocará un material junto con el nervio remanente y se realizará la reconstrucción de la pieza. La finalidad de la pulpotomía es mantener la pulpa de las raíces sana, sin signos clínicos ni radiológicos de afectación como pueden ser: dolor, sensibilidad, inflamación y la presencia de reabsorciones radiculares.
- Aparato dental: Es un método pensado para corregir cualquier alteración o anomalía del desarrollo óseo o dental pueda haber dentro de la boca del pequeño. Por ejemplo, estos aparatos pueden usarse en el caso de tener el maxilar inferior poco desarrollado o mal posicionado.
- Mantenedores de espacio: Son prescritos o recomendados por el odontopediatra después de la pérdida de una pieza dental de leche ya que la pérdida del diente en el niño supone el desplazamiento o movimiento de los dientes adyacentes, esto puede impedir la correcta erupción del diente definitivo.
Prevención en la Odontopediatría
La prevención es la mejor medicina, es por ello que para evitar problemas a largo plazo con la salud bucal de los pequeños, hay que seguir ciertas recomendaciones de las que hablaremos a continuación:
- Educación: Es el primer y más importante pilar de la prevención y su puesta en práctica en el niño corresponde a los padres, educadores y profesionales de la salud.
- Alimentación: La dieta desempeña un papel fundamental en el desarrollo de la caries dental. Son muchos los estudios que correlacionan el consumo de azúcar y la prevalencia de caries. Para prevenir caries en nuestros hijos es fundamental tener en cuenta estos pasos a la hora de idear su dieta:
- Dieta equilibrada. Reducir el consumo de azúcar
- Reducir la ingesta de refrescos azucarados
- Sustitutos del azúcar (sacarina; sorbitol; xilitol)
- Evitar consumo de dulces después de las comidas principales
- No consumir alimentos pegajosos
- Cepillado: El objetivo es la eliminación de la placa bacteriana y de los residuos alimenticios que se depositan sobre los dientes y los tejidos blandos. Aunque hagamos un correcto cepillado, con una técnica correcta, no quiere decir que estemos protegidos de las caries.
- Debe iniciarse coincidiendo con la erupción de los dientes
- En los primeros meses de vida, se debe utilizar gasas o cepillo mojado con cerdas blandas o dedales de silicona
- La supervisión por los padres de la higiene oral suele ser necesaria hasta los 10 años edad.
- En la mayoría de veces el desconocimiento de los padres es lo que hace que los niños no tengan una buena higiene oral
- Revisiones periódicas: Visitar al dentista debe ser tan rutinario como visitar al pediatra, por lo que la recomendación es que anualmente se asistan a las revisiones periódicas. Sin embargo, en el caso de los niños y por su constante crecimiento, es importante estar atento a cualquier cosa que pudiera ser extraña, y visitar al dentista ante cualquier eventualidad que se salga de lo normal.
La odontología preventiva es la mejor solución, porque prevenir siempre es más fácil y económico que tratar y para eso son necesarias las revisiones periódicas al odontopediatra, en las que cualquier patología se puede tratar de forma incipiente e incluso nos permitirá evitar la aparición de otras.